Este 31 de octubre la película ‘Chuzalongo’ llegará a las salas de cine de Ecuador. El estreno ha sido cuidadosamente programado para coincidir con una de las tradiciones más arraigadas del país, el Día de los Difuntos, ya que la historia de la película se entrelaza con los rituales y costumbres propias de esta época.
El próximo 31 de octubre, Chuzalongo, una película ecuatoriana con una ambiciosa coproducción internacional llegará a las salas de cine de Ecuador, aprovechando el feriado de los difuntos. El estreno ha sido cuidadosamente programado para coincidir con una de las tradiciones más arraigadas del país, ya que la historia de la película se entrelaza con los rituales y costumbres propias de esta época.
La película dirigida y escrita por Diego Ortuño, ha sido seleccionada para representar a Ecuador en los prestigiosos Premios Goya y Premios Forqué (septiembre de 2024) y recientemente ganó el Premio a Mejor Largometraje Iberoamericano en el Festival Macabro FICH en México, celebrado en agosto de 2024.
Esta producción se proyecta como una de las mejores películas de fantasía del cine ecuatoriano, combinando suspenso y magia en una historia fascinante.
Fue realizada en coproducción con Ecuador, Perú, España y Canadá, y cuenta con un destacado elenco internacional. Entre los actores principales destacan Bruno Odar, reconocido actor peruano que interpreta a Nicanor, y Wolframio Sinue, actor ecuatoriano que encarna a Melalo. El reparto incluye tanto a artistas indígenas debutantes, como Toa Tituaña, Yuyak Guitarra, Lenin Farinango y Sisa Farez, como a actores experimentados de la talla de Alex Cisneros, Fernando Basilio, Mónica Mancero, además de nuevos talentos como Karla Gómez y Gael Ortuño.
La película nos transporta a un remoto pueblo andino del siglo XIX, donde una enigmática criatura acecha a las mujeres que se encuentran solas en los campos. Con un guion cargado de simbolismos, dilemas morales y una profunda conexión con las leyendas tradicionales ecuatorianas, Chuzalongo destaca por integrar elementos culturales autóctonos, como la lengua quichua, utilizada en varios momentos, y los paisajes andinos que envuelven la narrativa.
«Desde que escribía el guion, ya visualizaba cómo contar la historia con los recursos que tenía», comenta Ortuño, quien comenzó a trabajar en este proyecto en 2018. «Esta película tiene una estética visual muy llamativa. La fotografía, el arte y las actuaciones no son algo común en el cine ecuatoriano», agrega.
Para Bruno Odar, trabajar con Diego Ortuño “fue una experiencia muy enriquecedora, especialmente por el rescate cultural de las leyendas que antes solo se escuchaban de los abuelos, y plasmarlas en imágenes en un film que cuida cada detalle desde el guion hasta la producción. Quedé impresionado por los paisajes andinos, muy parecidos a los de mi país”, señaló el actor peruano.
Con más de 100 personas en el equipo de producción y un elenco que incluye a 23 actores principales, Chuzalongo se posiciona como una de las grandes apuestas del cine ecuatoriano y de la región. La película fue filmada en haciendas históricas de Quito y Cayambe, recreando con maestría el Ecuador de finales del siglo XIX, en un contexto de profundas desigualdades sociales.
La dirección de arte estuvo a cargo de los diseñadores Jeff Calmet y Luighi Tang, junto a la directora de arte Viviana García Calapucha, de origen indígena. La dirección de fotografía, liderada por Túpac Galarza, fue especialmente desafiante, ya que recreó la iluminación de la época con faroles y velas, logrando una atmósfera auténtica y mágica que envuelve a los espectadores en cada escena.
Otro importante factor del porque Chuzalongo es una gran producción, es la música, que conjuga instrumentos tradicionales andinos con otros que crean un aire de mestizaje en la sonoridad del film. Emil Plonski y Agni Durden fueron los encargados de crear la banda sonora que logra transportar al espectador a un mundo de magia y suspenso.
F: LA HORA
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