El asesinato de Brayan Chuchuca, un conductor de la cooperativa Panorama de Durán, que fue secuestrado 48 horas y después fue encontrado muerto con signos de tortura, rompió el silencio de transportistas.

Se estima que más de 1.000 buses que recorren las rutas al noroeste de Guayaquil pagan a extorsionadores para poder trabajar.

El presidente de la Federación de Cooperativa de Transporte, Abel Gómez contó que en estos momentos se paga entre 30 y 50 dólares mensuales para la protección de sus vidas, donde los delincuentes contactan a los jefes de cooperativa para explicarles cómo deben realizar el pago.

Se presume que los antisociales dan información de familiares, nombre de sus hijos, el lugar de estudio y piden un monto hasta de 3.000 dólares.

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