FOTO TOMADA DE LA CUENTA DE X (TWITTER) DEL PRESIDENTE GUILLERMO LASSO
El presidente Guillermo Lasso informó los avances logrados en la lucha contra la desnutrición crónica infantil (DCI) durante sus 28 meses de gobierno. El Presidente destacó que la enfermedad ha disminuido un 3,5% durante este período
Esto significa que 20.000 niñas y niños menores de dos años y 60.000 niñas y niños menores de cinco años estarán exentos del uso del DCI. “Es absolutamente estratégico lanzar múltiples acciones simultáneamente con una visión nacional”, subrayó el Jefe de Estado.
Explicó que mientras promueven controles de salud a madres y niños en estado de gestación o lactancia, también están entregando bonos a mujeres embarazadas. Un total de 62.000 mujeres reciben asistencia de este país.
También señaló que en el marco de esta política se reconstruyeron 588 centros de salud, se contrataron más trabajadores de la salud y se asignaron recursos por un total de 648 millones de dólares a proyectos de agua potable municipales y prefecturas.
“Todos los ecuatorianos, sin excepción, y en especial aquellos que tienen bajo su responsabilidad la administración de recursos públicos, deben entender que la Desnutrición Crónica Infantil tiene consecuencias graves e irreversibles en los niños que la padecen. Afecta su desarrollo neurológico a su habilidad para aprender, para comunicarse, para pensar y relacionarse con los demás.”, enfatizó el presidente Lasso.
En su mensaje, Lasso indicó que debido a que el DCI provoca que niños y niñas desde el inicio de su vida tengan enormes desventajas que repercutirán de forma negativa en su futuro, implementará “el plan estratégico intersectorial para la prevención y reducción de la desnutrición crónica infantil”.
Por ello, el Estado coordinará estratégicamente la atención de las mujeres embarazadas y sus hijos durante los primeros 1.000 días de vida. “Las mujeres embarazadas se someten a exámenes prenatales, reciben hierro y ácido fólico, reciben educación sobre nutrición y preparación de alimentos saludables”, explicó el Presidente.
Según el Presidente, esta política incluye garantizar que, incluso después del nacimiento del niño, se cumplan plenamente los calendarios de vacunación, se evalúe el estado nutricional, se evite la anemia y el niño reciba vitaminas y nutrientes.
“En este punto debemos terminar con el mito de que la desnutrición crónica infantil es un asunto de pobreza. La información que hemos levantado con el INEC nos demuestra que en el 20% de los hogares más pobres del país, este tipo de desnutrición, aqueja al 24% de los niños menores de 2 años. Mientras que en el 20% de los hogares más ricos afecta a un 15.2% de los niños”, informó el Jefe de Estado.
Ponderó que, una vez que culmine su mandato, esta política queda financiada para los próximos años “con fuentes de inversión internacional y presupuesto por resultados. Las madres, niñas y niños seguirán recibiendo esta tensión. Todo está establecido para continuar reduciendo la desnutrición crónica infantil”.
“Aquí no caben banderas políticas, ni ideologías ni intereses partidistas, aquí solo cabe continuar y fortalecer esta política pública que debe mantenerse como una política del Estado ecuatoriano y ser considerada la mayor y mejor inversión que hacemos sobre nuestro futuro”, finalizó el presidente Guillermo Lasso.