La crisis energética en Ecuador está afectando tanto a los hogares como a la industria, y uno de los sectores más perjudicados es el lácteo. La falta de electricidad no solo impacta en el suministro residencial, sino también en el proceso productivo, desde el ordeño en las granjas hasta la llegada de los productos lácteos a los consumidores. Este problema se agrava día a día, lo que podría tener serias consecuencias si no se toman medidas inmediatas.
El proceso de producción de leche involucra varios pasos críticos, y cada uno de ellos depende de la electricidad. Desde el ordeño de las vacas en las granjas hasta el almacenamiento en centros de acopio y el procesamiento en plantas industriales, la energía es esencial. Las tiendas y supermercados también enfrentan dificultades para mantener los productos refrigerados, lo que pone en riesgo la calidad y disponibilidad de estos en los hogares ecuatorianos.
Ante esta situación, el gobierno ha implementado un racionamiento de energía que afecta gravemente al sector industrial. El 4 de octubre, el ministro de Energía, Antonio Gonçalves, anunció cortes de luz del 50% en horario laboral, lo que ha sido calificado como “inaceptable” por los empresarios. Este racionamiento podría llevar a la escasez de productos lácteos, lo que afectaría tanto a los productores como a los consumidores.
Verónica Chávez, directora del Centro de la Industria Láctea, ha señalado que la capacidad de las industrias para sostener su producción está en riesgo. Mientras que las grandes empresas cuentan con generadores eléctricos, las medianas y pequeñas industrias no tienen los recursos necesarios para enfrentar esta crisis. Esto podría traducirse en la pérdida de millones de litros de leche al día, afectando gravemente al sector ganadero.
Además, la crisis energética no solo amenaza la producción, sino también el empleo en el sector lácteo. Con 448.000 empleos fijos en todo el país, ya se ha reportado una caída del 3% en el último año. Si la situación continúa, no solo habrá menos productos en el mercado, sino que miles de familias podrían perder su sustento. La crisis energética está golpeando todos los niveles de la industria láctea, y las consecuencias podrían ser devastadoras para la economía y la sociedad ecuatoriana.
F: ECUADOR DIRECTO