FOTO TOMADA DEL MEDIO DIGITAL HOLA
La duquesa de Sussex asiste al show más especial de la artista, el de su 42 cumpleaños.
El príncipe Harry y Meghan Markle asistieron el viernes al concierto de Beyoncé en Inglewood, California. Los duques de Sussex, y en especial la actriz, se lo pasaron en grande en el espectáculo de casi tres horas de duración de Queen B, en el que se repasaron algunos de sus mayores éxitos, como «Crazy in Love» o «Cuff it «.
Apenas unos días más tarde, Markle repetía la experiencia pero esta vez sin la presencia de su marido, su madre Doria Ragland y su amiga, la actriz Abigail Spencer. La protagonista de Suits volvía a asistir al show más especial de Beyoncé, puesto que este pasado lunes la artista sopló las velas de su 42 cumpleaños.
Se trata de un día tan importante que la cantante quiso celebrarlo con un gran concierto al que asistieron muchos nombres famosos, entre ellos Kim Kardashian, Kylie Jenner (Kylie Jenner) con sus nuevos compañeros de reparto Timothée Chalamet, Zendaya y Tom Holland o Meghan Markle. Felizmente durmiendo con Kerry Washington y Kelly Rowland.
Como ya hiciera el viernes, la duquesa cumplió con el dress code que la propia Beyoncé ha marcado para su gira Renaissance World Tour. “La temporada de los Virgo ya está aquí. Esta gira está siendo una gran alegría para mí y como deseo de cumpleaños quiero que todo el mundo lleve puestas sus prendas plateadas más fabulosas para brillar como si fuéramos bolas de discoteca”, expuso la cantante en sus redes.
Markle volvió a apostar por un vestido relleno de lentejuelas, aunque el diseño completo no se puede ver en las fotos que circulan por internet.
La parte más evidente es la parte superior del cuello, que es el escote más favorecedor ya que enmarca la zona de los hombros y es uno de los favoritos de la duquesa.