El abandono, las lluvias y el terremoto han complicado el estado de las infraestructuras educativas del Ecuador. Solo por sismo hay 308 inmuebles afectados.
Hasta el domingo 19 de marzo del 2023, la Secretaría de Gestión de Riesgos y Emergencia (Sngre) reportó 112 planteles educativos afectados. Pero dos días después, está cifra escaló a 308.
Técnicos de las zonales del Ministerio de Educación (ME) siguen realizando las inspecciones, según las alertas recibidas por autoridades de los planteles y tenencias políticas.
Azuay es la más impactada con 115 inmuebles con daños. Entre ellos está: colapso de muros, fisuras en paredes y pisos, desplome de mamposterías, rotura de vidrios, estucos y movimiento de cubiertas.
El Oro y Guayas registra 53 planteles afectados cada una, Cañar y Manabí con 21 y Loja con 20. Otras provincias como Morona Santiago, Los Ríos, Zamora Chinchipe y Santa Elena tienen cinco cada una y el resto con menos de cuatro planteles afectados.
En las provincias de la Sierra y Amazonía no se han suspendido las clases. Los estudiantes continúan en sus actividades normales, presenciales, tomando las debidas precauciones

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