El sismo registrado el 18 de marzo de 2023 en Balao, provincia del Guayas, provocó la licuefacción del suelo, en ciertas áreas. Este fenómeno consiste en que el suelo arenoso, que está lleno de agua, pierda su capacidad de sostener estructuras.
Mario Ruiz Romero, director del Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional, explica que este fenómeno se presenta en suelos arenosos que tienen una alta presencia de agua. Estas superficies normalmente son firmes (sólidas). Pero cambian cuando ocurre un sismo.
El sismo que se registró el18 de marzo de 2023 tuvo una magnitud de 6.5 grados en la escala de Richter. El epicentro fue en Balao, en Guayas.
Cuando un suelo de este tipo empieza a ser sacudido por un sismo, el suelo arenoso que está lleno de agua se comporta como un lodo y pierde la capacidad de sostener estructuras. A veces se presentan hundimientos de las estructuras que estaban construidas encima de estas superficies.