Las primeras lluvias ya se hacen sentir en gran parte de la provincia. Las autoridades buscan prever cualquier anomalía con la llegada del invierno. Mediante un boletín de prensa emitido por el Instituto Nacional de Meteorología e Hidrografía (Inamhi), los técnicos han pronosticado que las lluvias serán constantes con tormentas eléctricas y ráfagas de vientos.
Según el Inamhi, las lluvias podrían ocasionar acumulación de agua, desbordamientos de ríos y cierre viales por deslizamientos de tierra. En la ciudad ya se puede observar el aumento del caudal del río Quevedo, lo que es tomado en cuenta por los habitantes que están en zonas vulnerables que es tomado en cuenta por los habitantes que permanecen en zonas vulnerables.
Mientras tanto, el jefe de laboratorio de la EPMAPAQ, Narciso Yonfá, explicó que, debido al fuerte temporal y torrencial aguacero que cayó en la zona de captación, ubicada en el sector Las Peñas se cerraron las rejillas. Esto debido a las grandes palizadas y lodo que trae consigo el río Calope, afluente natural del Cotopaxi que proporciona agua a Quevedo.
El cierre fue para evitar el ingreso del agua sumamente turbia y densa a la planta central, por lo que mermó el abastecimiento del líquido vital en la ciudad. “Esta acción disminuirá el acopio del agua a la planta central de tratamiento, por consiguiente bajarán los volúmenes, caudales y presiones del agua en todos los sectores de Quevedo”, indicó el funcionario. Además, reveló que se continúa con la dosificación al tratamiento de la poca agua superficial del río Calope que llega a la planta central de Quevedo.
Este proceso de desinfección y potabilización representa mayor inversión de recursos económicos en época invernal, por el aumento de dosificación de Sulfato de Aluminio para el tratamiento de potabilización del líquido vital.
Es decir, se ha tenido que disminuir el caudal que ingresa a la planta central potabilizadora, para poder tratar el agua superficial, aparte de eso, también se hacen desagües diarios donde se elimina el lodo que se acumula en los sedimentadores.
“Esperemos que en los próximos días vayan disminuyendo las lluvias en esta zona, de esta manera podemos aumentar más el caudal y por consiguiente aumentaría la presión de agua en Quevedo”, expuso YonFá.